Ayer, Hoy y Siempre

Padre Hugo Segovia
Por Padre Hugo Segovia.

PADRE HUGO SEGOVIA

Hablar con el corazón

La jornada Mundial de las Comunicaciones Sociales se celebra el día de la Ascensión desde hace 57 años y es uno de los frutos del Concilio Vaticano II que, en sus primeros tramos, discutió el tema en el aula conciliar y fue aprobado en 1963.
La fecha fue elegida por el Papa Pablo VI que hizo jugar en la coincidencia de las fechas pues estableció que se celebrara el día de la Ascensión del Señor a quien calificó de gran comunicador: del Padre a nosotros y de nosotros en el Hijo, al Padre.
Además se ha hecho también costumbre que el día de San Francisco de Sales, el 24 de enero, se publique el mensaje que cada año emitirá el Papa.
Decíamos, en nuestra columna del 2 de febrero, que éste es el santo patrono de las comunicaciones a las cuales el Concilio llama “maravillas del mundo actual” “y a nosotros también nos ayuda a celebrar la jornada el hecho de que el 24 de enero de 1984 falleció, en Santa Fe, el arzobispo Vicente Zazpe, un apóstol de los medios en nuestra patria durante su vida.
Este año ocurrirá el 21 de mayo y tendrá como tema “hablar con el corazón” tomando de un texto de la carta del apóstol Pablo a los cristianos de Efeso: “según la verdad en la caridad”, 4, 15.
Los años anteriores el Papa Francisco, había hecho referencia en su mensaje, a los verbos “ir”, “ver” y “escuchar” que son esenciales para una buena comunicación.
Ahora hablar de “hablar con el corazón”.

Un corazón que ve

Francisco recuerda que el Papa Benedicto XV, en la encíclica “Deus caritas est”, había escrito que “el programa del cristiano es un corazón que ve” un corazón que, “con su latido revela, la verdad de nuestro ser y que por eso hay, que escucharlo”.
Por eso es el corazón el que nos ha movido a ir, ver y escuchar y es el corazón el que nos mueve a una comunicación abierta y acogedora, y “después de habernos ejercitado en la escuela podemos entrar en la dinámica del diálogo y el intercambio que es precisamente la de comunicar cordialmente”.
Si nos asalta el miedo a proclamar la verdad aunque a veces sea incomodo hay que hacerlo pero no sin caridad, sin corazón.
Ello también nos posibilita ir más allá de las apariencias y superar los ruidos confusos que tantas veces, en el campo de la comunicación, no nos ayudan a discernir la complejidad del mundo en que vivimos. “La llamada a hablar con el corazón interpela a este tiempo tan propenso a la indiferencia y a la indignación a veces sobre la base de la desinformación que falsifica e instrumentaliza la verdad”.
Se trata de entonces de “comunicar cordialmente” porque el que nos escucha descubre que quien habla o escribe busca la verdad y lo hace con caridad y custodia su libertad sin violarla.
Francisco pide a la Iglesia una comunicación que encienda los corazones, que su bálsamo sobre las heridas e ilumine el camino de los hermanos”.
“Sueño, dice el Papa, con una comunicación que se deje guiar por el Espíritu Santo, amable y a la vez profética que sepa encontrar nuevas formas y modalidades para el maravilloso anuncio que debe dar en el tercer milenio”.

La cruz de San Andrés

Haciendo alusión a San Francisco de Sales, el Papa recuerda que “el santo obispo de Ginebra nos enseña que todos somos comunicadores y que una lección que va contra corriente hoy, en un tiempo en el que experimentamos sobre toda en las redes sociales, la comunicación con frecuencia instrumentalizada para que el mundo nos vea como queríamos ser y no como somos.
Hace 100 años que Pío XI lo proclamó como patrono de los periodistas por su “actitud apacible, su humanidad, su disposición a dialogar con paciencia y con todos, especialmente con los que lo contradecían.
No quiero terminar sin recordar que se cumplen 40 años de la entrega de la primera Cruz del Sur de San Andrés que fue la respuesta a esa Jornada y que quería distinguir, cada año, a algún medio destacado por lo cual el primero de los diez que la obtuvieron fue un periodista y comunicador que estuvo -y está- siempre haciendo concreto aquello de que “Miramar es noticia”: Alberto Solari a quien, junto con los otros nueve, saludo con mi afecto y gratitud.