Santa Teresita: Tomás Tello murió de una puñalada al corazón

Así fue revelado tras el estudio forense de la víctima. La mayoría de los agresores eran vendedores ambulantes de la playa. Por el crimen de Tomás Tello Ferreyra hay nueve detenidos, entre los que está el presunto homicida.

El resultado preliminar de la autopsia al cuerpo de Tomás Tello determinó que la víctima falleció a causa de “una herida punzocortante en la línea media de tórax con laceracion de aurícula derecha que provoca taponamiento cardíaco, lo cual provocó la muerte”. 

Con estos datos, este miércoles el fiscal Pablo Gamaleri indagará a los detenidos por el asesinato de Tomás, el joven de 18 años muerto de una puñalada por una patota en Santa Teresita mientras celebraba Año Nuevo.

Gamaleri, titular de la UFI N°11 del Partido de la Costa, pidió la detención de todos los sospechosos al juzgado de Garantías del caso por los delitos de homicidio agravado por concurso premeditado y alevosía, la misma calificación que se le aplicó a los rugbiers condenados por el crimen de Fernando Báez Sosa y cuya única pena prevista es la prisión perpetua. Según el fiscal, los acusados acordaron el plan para su muerte, con Damián Kopelian, de 21 años, vendedor ambulante en la playa, señalado como el presunto autor material del crimen, el responsable de apuñalar a Tomás.

Una discusión por motivos que aún son materia de investigación en el interior de una casa de Santa Teresita, donde se realizaba una fiesta, fue el desencadenante de la feroz golpiza por parte de una patota y una puñalada que le quitó la vida a Tomás Valentín Tello Ferreyra (18) en la mañana de Año Nuevo.

El ataque ocurrió cerca del muelle de Santa Teresita, donde el adolescente había salido con amigos que fueron testigos de cómo un grupo de personas -la mayoría de ellos vendedores ambulantes de las playas-  lo corrieron por más de seis cuadras, lo golpearon y uno de ellos lo apuñaló hasta matarlo.

Por el crimen, hay nueve detenidos: siete mayores y dos menores, que quedaron a cargo del fuero Juvenil.

Este martes, el fiscal Pablo Gamaleri, a cargo de la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) 11 del departamento judicial de Dolores, indagará a los sospechosos, entre los cuales se encuentra el presunto homicida, de 21 años, y su padre, un ciudadano uruguayo de 57.

Otros dos vendedores ambulantes de playa, de 27 y 29 años, son los principales sospechosos del crimen asesinato. En tanto la justicia investiga la situación del resto de los aprehendidos, entre los que se encuentran los menores de 16 y 17 años.

Por ahora la caratula del caso es de homicidio agravado por la participación de dos o más personas pero no se descarta agravar la imputación a un “concurso premeditado”.

Fuentes revelaron a Infobae que uno de los testigos directos del ataque al albañil oriundo de Mar del Tuyú, se había originado con anterioridad. “Había habido un problema en una fiesta anterior entre Tomás y sus agresores. Se cruzaron en la zona del muelle de Santa Teresita y los victimarios decidieron vengarse”.